Hoy, la investigadora de la UAH, María Teresa Johansson, comparte con nosotros la presentación que escribió durante la inauguración, este 12 de marzo, de “Marga, cavar adentro“, de Victoria Jolly, emplazada en la explanada del Parque Cultural de Valparaíso, con la curatoría de Pedro Donoso. Este es un proyecto, que se podrá visitar por dos meses, financiado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio (Fondart Regional) e inscrita en el marco curatorial 2022 del PcDV “el desafío de imaginarnos nuevamente juntxs”, en el que se propone repensar nuestra forma de habitar el territorio re-considerando el cuerpo y nuestros límites.
“Marga”, al igual que el hormigón, es el nombre de una roca sedimentaria que se utiliza como fertilizante, formada por estratos a partir del depósito de materiales sólidos de diversos tamaños que son transportados por el viento, el agua o el hielo y unidos unos a otros a través de un proceso llamado diagénesis. Así se forma una sola roca con materiales pre-existentes. Pero “Marga-Marga” es también el nombre de una de las provincias de la región de Valparaíso que en lengua kichwa significa liviano y transportable; en mapudungun es “malghen”, mujer, aludiendo a las mujeres lavanderas que en tiempos prehispánicos se bañaban en el curso de agua, con el mismo nombre, nacido de los macizos de la Cordillera de la Costa.
I. Marga emergió entre los suelos de arena de la Ciudad Abierta. En las dunas del secano costero, entre las malezas deshojadas, Victoria Jolly vació una mezcla de hormigón en moldes con una impresión textil. De manera artesanal, acompañó la espera de su fragua, luego capturó sus primeras imágenes.
II. Levantada en gran tamaño, Marga replica la figura orgánica de una enorme calabaza, pero también la forma arquitectónica de una cúpula, un observatorio astronómico visto a lo lejos. Esta bóveda estelar pronto tendrá raíces en la profundidad de la tierra.
III. Un camión cargado se desplaza desde Ritoque al antiguo polvorín en el cerro porteño que fue la cárcel de Valparaíso y hoy es el Parque Cultural, emblema de la transformación de la sociedad chilena. La carga del camión está conformada por varios moldes con la forma de gajos de hormigón que en su viaje cruzan el río Aconcagua y el estero Marga Marga para llegar a su destino en altura, en el gran mirador hacia la bahía del Pacífico. El sintagma “gajos o lonjas de hormigón” suena casi como un oxímoron. Acostumbrados a asociar el hormigón con la arquitectura moderna y la edificación resistente y antisísmica, estas piezas curvas, delgadas y frágiles, casi quebradizas, grabadas en su superficie con un hilado del telar que fue parte de su moldaje, y pintadas en el interior con colores de terracota, desarman nuestras preconcepciones del material.
IV. En los primeros días de marzo, estas formas impensadas del hormigón se apilan sobre el césped a la espera de integrarse a la figura diseñada por Victoria Jolly: una esfera en cuya cavidad podremos entrar. Mientras tanto, quedan varios días para horadar, cavar, hacer un hoyo y una ruta que deje en vilo y a la vista las sedimentaciones, los rellenos, las piedras entre algunas pequeñas raíces, los ladrillos y el carbón, la tierra entre la que se disemina el cuarzo. Se cava con palas y chuzos en jornadas intensas solo aplacadas por el viento sur que se levanta al atardecer y refresca los cuerpos en obra, acalorados por el sol.
V. Marga penetra lo terrestre en la acción de cavar, ambiciona un refugio, una guarida, toda vez que cavar en la cárcel es también un acto de escape, de fuga. Lejos de la trinchera pero no de la fosa, ante la amenaza de la guerra en otro punto del globo, miles de personas pernoctan estos mismos días en la profundidad de la tierra.
VI. Entrar en la cavidad de la esfera de Marga como se entra en la tierra, recuerda La Amortajada de María Luisa Bombal: “Porque todo duerme en la tierra y todo despierta de la tierra”. Respirar adentro de un espacio vacío que conjuga el subsuelo y la luz que ingresa desde lo alto y se transparenta entre los pliegues traslúcidos de la cera que une las piezas.
VII. “Marga cavar adentro” es una instalación, es locación, trayecto y experiencia. Victoria Jolly ha creado un espacio resguardado por la materia protectora del hormigón donde se intensifica la percepción de sí, del movimiento y el claroscuro. En Marga, lo subterráneo y la cúpula estelar dialogan, se conectan de una forma que solo experimenta quien está adentro.